Evidentemente se trata de Pirmin Zurbriggen, que harto de quedarse tieso en la nieve buscó horizontes más cálidos y latitudes más templadas participando en los juegos olímpicos de Nápoles y Sicilia 1988, boicoteados por la mayor parte de la comunidad internacional por el escaso rigor de los dispositivos antidopping, pero especialmente fecundos en la consecución de marcas.
Aquí los vemos con un compañero de delegación y algunos atletas que conocieron en dichos juegos.
Y quienes son los otros dos mendas... Ya te vale.
ResponderEliminarEl del círculo es Zubbrigen, el otro no lo tengo localizado pero podrías investigar
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